¿Qué hacer cuando una persona no puede administrarse? Los casos típicos de interdicción resultan en personas que carecen de sus facultades mentales ya sea por vejez o por razones médicas y que por lo tanto dependen de otro para realizar cualquier gestión administrativa o económica.
En estos casos se debe presentar una solicitud de interdicción, que tiene por objetivo decretar que una persona es interdicta o incapaz de administrar sus bienes con el fin de que un tercero que puede ser un pariente se los administre y de esta forma garantizar el bien estar de la persona interdicta.